lunes, 26 de diciembre de 2011

Miedo

¿Tienes miedo? Yo si. ¿De qué? De todo.

Algunos dicen que el miedo es malo, uno de los peores defectos del Ser humano; yo no estoy de acuerdo, creo que el miedo no es necesariamente malo, no si sabes aprovecharlo, si lo controlas y lo utilizas en tu beneficio. Pero hay veces, como ahora, en que no puedes evitar que te arrastre, el miedo se apodera de ti, pero ¿A que le tienes miedo?

Al olvido, la memoria es frágil, me da miedo pensar que la gente a la que quiero o la gente a la que quise me olvide, pero me asusta más pensar que yo pueda olvidarme de ellos, de gente a la que quiero y que ya no está conmigo.

Miedo al tiempo, que afecta a todo, desde lo más grande hasta lo más pequeño, tanto a los seres vivos como a los inertes, a todos, porque todos somos hijos del tiempo y éste se los come, los mata, uno a uno.

Temor al rechazo, a que no me acepten como soy, a que me digan NO y me den la espalda por ser diferente.

A la Libertad, demasiado grande, inmensa, cargada de decisiones, de errores, de responsabilidades.

Temor al dolor, temo todo tipo de dolor, tanto físico como emocional; el dolor siempre está ahí, presente como consecuencia de todos los actos, como castigo, como advertencia.

Miedo a no vivir, a que la vida pase sin haberla aprovechado al máximo, miedo a pensar demasiado lo que debo hacer.

Al miedo, me asusta pensar que el pánico puede apoderarse de mi cuerpo, miedo a tener demasiado algo, miedo a tantas cosas…

¿Mi solución? Ya la he dicho, afrontar los temores, valiente no es el que no tiene miedo, sino el que lo afronta, el que se enfrenta a él.

lunes, 5 de diciembre de 2011

Akasha, La Cazavampiros II

Hoy no tocaba ir de caza, era mi noche libre y ni siquiera llevaba armas encima, al menos no armas contundentes. Y como siempre tenía que haber alguna sorpresita esperando, si hasta me había arreglado, por amor de Dios! Por lo menos al final no me había dejado convencer y me había puesto unos pantalones. por experiencia os digo que dar patadas con minifalda no eslo más cómodo que hay... ni lo más efectivo en realidad.
La cuestión es que esta vez me estaban esperando y eso me pareció raro, no me había pasado nunca. Y mientras pateaba el culo de los dos primeros vampiros que me encontré el tercero, que esperaba en el fondo del callejón gritó:
- ¡Eh! ¡Cazavampiros! Tengo un mensaje para tí, es de Mi Reina, lo traigo por escrito para...
Y ahí fue cuando llegué hasta él y le clavé la estaca de bolsillo que siempre llevo. No suelo ponerme a dialogar con chupasangres, pero por lo menos me digné a recoger el sobre antes de que se destruyera junto con el mensajero.


- ¿De verdad que tenías que ocuparte de ellos ahora? Ni siquiera una noche libre, cariño, esto no está bien... No es que...
- Lo se, pequeña, lo se, pero es lo que toca, dejarlos ir va en contra de mis principios... De todos modos creo que por hoy ya está bien, si no me equivoco una vez entregado el mensaje no me buscarán más... y yo estaré demasiado ocupada contigo como para buscarlos a ellos. ¿Te parece bien?
- Por supuesto, vámonos a cenar, que verte haciendo tanto ejercicio me ha abierto el apetito.
Sus carcajadas sonaron rompiendo la tranquilidad momentánea de la noche...